lunes, 12 de mayo de 2014

Química de especias

Siempre hemos utilizado las especias como aderezo fundamental en todos nuestros platos. La pimienta, la albahaca, el orégano o el clavo son solo algunos de los condimentos que usamos en la cocina para darle cierto toque especial.
Y es que, a parte del sabor y el aroma característicos de cada una de ellas, las especias contiene compuestos químicos que nos ayudan a vivir de manera más sana. Este post va dedicado a la química de las especias y sus efectos beneficiosos para nuestra salud:

 La pimienta de cayena contiene capsaina (8-metil-N-vanilil-6-nonenamida) y es el componente responsable del sabor picante.Uno de los trucos para neutralizar su sabor es comer pan,aceite o grasas. La leche es muy eficaz sobretodo si es entera y ademas la caseína (proteína de la leche), rodea la capsaina volviéndola ineficaz.
La capsaina es un anelgésico natural y un estudio reciente de la Universidad de Nottingham lo recomienda como anticancerígeno.


 La pimienta negra contiene piperina (1-[5-(1,3-Benzodioxol-5-il)-1-oxo-2,4-pentadienil]piperidina)  que junto a la capsaina es responsable de la pungencia, un estudio de la Universidad de Sejong, en Saúl, han descubierto que la piperina interfiere en los genes responsables de formar nuevas células grasas lo que ofrece una nueva pista para ayudar a combatir la obesidad y controla el colesterol.
El cinamaldehído es el compuesto que da ese olor y sabor tan característico de la canela. A parte de sus aplicaciones como saborizante para helados, dulces y bebidas, el cinamaldehído también se utiliza como un fungicida e insecticida para matar larvas de mosquitos.
El característico olor a clavo se debe al eugenol (2-metoxi-4-(2-propenil)fenol) que se extrae como un aceite amarillento. Este compuesto es muy buen antiséptico pero se utiliza sobretodo como anestésico local.

El carvacrol (5-isopropil-2-metil-fenol) está presente en el orégano, aunque también podemos encontrarlo en el aceite de tomillo o la bergamota. Su principal función es prevenir la contaminación bacteriana, inhibe el crecimiento de la Escherichia coli o las pseudomonas aeruginosas. También se usa en medicina por sus propiedades antiinflamatorias y un estudio publicado en 2005 describió el carvacrol como un potente inhibidor de la célula de carga A549, que está relacionada con el cáncer de pulmón.