jueves, 9 de abril de 2015

¡A lavar platos!



Hoy en día, podemos librarnos de la tarea diaria de fregar los platos gracias a ese gran invento: el LAVAVAJILLAS

De tanto en tanto es necesario cuidar de nuestro lavavajillas, ya sea con abrillantador o con la sal. 

El otro día, mi lavavajillas se quedo sin sal, me dispuse a ir a comprarlo al supermercado cuando vi que había una gran variedad de marcas y de precios y me paré a pensar: ¿no son todas las sales iguales?¿qué sal debo utilizar para mi lavaplatos y por qué?


En química definimos sal como un compuesto iónico, la sal común es la que utilizamos en casa para condimentar la comida su fórmula química es NaCl (cloruro de sodio).

Bien, para el lavavajillas también utilizamos cloruro de sodio. En algunos casos los envases que compramos indican que la ésta sal no es apta para el consumo, esto se debe a que contiene algunas impurezas como sales de hierro, sulfatos o bicarbonatos. Por otra parte, hay otros envases que indican SAL LIBRE DE IMPUREZAS. Y es en este caso, cuando te están vendiendo por el doble o el triple de su valor, lo que llamamos sal común.

Los lavavajillas llevan un aparato llamado descalcificador, que incluye un depósito que se debe llenar de sal. Cuando entra el agua en los ciclos de lavado y aclarado final, el agua necesaria pasa por el depósito de sal, donde recoge el sodio de la sal, y luego por el descalcificador, donde cede los iones sodio a las resinas, intercambiándolos por iones de calcio y de magnesio (responsables de la dureza del agua). De esta menera, el agua entra en la cuba libre de cal y magnesio, que se ha quedado en las resinas del descalcificador. Durante el ciclo de secado, se produce una entrada de agua salada en el depósito de las resinas, con lo que se "regeneran" absorbiendo el agua los iones de calcio y de magnesio y cediendo a las resinas los iones sodio, dejándolas preparadas para volver nuevamente al ciclo de descalcificación del próximo lavado.

El agua de regeneración, cargada de cal y magnesio, va directamente al desagüe, igual que los restos de impurezas de la sal utilizada.

En resumen, la función de la sal en el lavavajillas es la de disminuir la dureza del agua (la cal),intercambiando los iones Ca y Mg por iones de Na.

CONSEJO: Si necesitáis usar sal, no os dejéis engañar por la publicidad, compra la sal gorda más barata que encuentres, de todas formas, las impurezas se van a ir por el desagüe...